La Philippe Chatrier se engalana para el debut del campeón y "rey de la tierra batida", Rafa Nadal que a partir de las 15:00 y con las cámaras de Cuatro como testigo, se mide al italiano Simone Bolelli, número 111 del ranking ATP y que ha sucumbido en los dos duelos en los que se ha medido contra Rafa Nadal sobre tierra batida, Roma 2011 y Rotterdam 2012.
El fino revés del transalpino no será ningún obstáculo para la potente derecha de Nadal, un rodillo sobre la arcilla rojiza que con las rocosas bolas de Roland Garros se convierte en todo un misil para sus rivales. Djokovic y Federer saben de la dificultad de controlar tales bolas y han pedido una unificación de tales pelotas para todos los torneos que se disputen sobre tierra batida ya sean Masters 500, 1000 o Grand Slam como este Roland Garros.
El balear y gran favorito para revalidar el título de Roland Garros conquistado ante Federer el año pasado (2011) disputará a más de 30 grados el encuentro, bajo un calor asfixiante que esperemos agote lo menos posible a nuestro gran campeón.
En la Chatrier, Djokovic invirtió ayer dos horas y cuatro minutos para tumbar a un tipo duro, el también italiano Potito Starace: 7-6 (3), 6-3, 6-1, con primer set de 59 minutos. "Roland Garros se gana en la primera semana; lo hace quien menos se desgasta", dijo cierta vez Andre Agassi.
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